Hacen oficial la quiebra de Altos Hornos de México; en el desamparo, 70 mil trabajadores

Un tribunal de comercio anunció ayer la bancarrota de Altos Hornos de México (AHMSA), que durante más de treinta años fue la principal empresa siderúrgica del país, de la cual dependen aproximadamente 70,000 familias. Este evento marca el cierre de una etapa en la industria del acero en México y afecta de manera significativa a la economía de la región carbonífera de Coahuila.

Ante la imposibilidad de alcanzar un acuerdo con los acreedores en el proceso de concurso mercantil, Ruth Huerta García, jueza segunda de distrito en esta materia, declaró de manera automática la quiebra de la empresa ubicada en Monclova. De este modo, se da inicio al proceso de liquidación, en el cual se deberán saldar las deudas a aproximadamente 20 mil empleados directos, quienes no han recibido su salario desde hace cerca de dos años, así como a más de mil 600 acreedores.

La empresa siderúrgica necesita aproximadamente 900 millones de dólares, de los cuales, por lo menos 650 millones deberían ser utilizados para saldar las deudas que mantiene con sus trabajadores y acreedores, entre los que se encuentran la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y Petróleos Mexicanos (Pemex). El monto restante se utilizaría para reiniciar sus actividades.

En un breve aviso dirigido a la Bolsa Mexicana de Valores, la compañía, cuya principal participación fue de Alonso Ancira durante muchos años, indicó que renueva su compromiso de colaborar de manera integral en este proceso, con el objetivo de encontrar soluciones que reduzcan el impacto en todas las partes implicadas.

Una vez que se declara la etapa de quiebra, la ley establece un plazo de cinco días hábiles para la publicación en el Diario Oficial de la Federación. Esto significa que ya no se llevarán a cabo negociaciones ni reestructuraciones, y se inicia el proceso de maximizar el valor de todos los activos con el objetivo de venderlos.

Durante más de 30 años, AHMSA se consolidó como la principal empresa siderúrgica de México y una de las más destacadas en América Latina. Su quiebra impacta a más de 70 mil empleados, incluyendo aproximadamente 20 mil trabajadores directos y 50 mil indirectos. El cierre de minas y otras empresas en la región central y carbonífera de Coahuila, que dependían de las actividades de esta firma, representa un severo golpe para la zona, dado que AHMSA contribuía alrededor del 8 por ciento al producto interno bruto del estado.

AHMSA se estableció en 1942 en Monclova, Coahuila, convirtiendo una zona agrícola en el centro de la producción de acero, contribuyendo con un 15 por ciento del acero producido en México.

Hace tres décadas, de acuerdo con cifras oficiales, la economía de la zona carbonífera (las comunidades que producen carbón para la fabricación de acero) dependía en un 90 por ciento de las actividades de la compañía.

En 1991, el expresidente Carlos Salinas de Gortari cedió la siderúrgica mexicana por solo una quinta parte de su valor al propietario del Grupo Acerero del Norte (GAN), Alonso Ancira.

A lo largo de los años, la economía de la región ha ido diversificándose. No obstante, hasta comienzos de esta década, un tercio de la actividad económica seguía dependiendo de esta empresa. Por lo tanto, su cierre de operaciones a principios de 2023 provocó una grave crisis.

AHMSA logró su máximo volumen de producción en 2016, alcanzando 4.6 millones de toneladas de acero líquido. No obstante, tras las denuncias de lavado de dinero y corrupción, su presidente de aquel entonces, Alonso Ancira, fue detenido en España, lo que dio lugar a una serie de problemas financieros que le impidieron cumplir con sus compromisos económicos y laborales. Como consecuencia, para 2022, su producción de acero no superó el millón de toneladas.

En su apogeo, la compañía alcanzó un máximo de 22 mil empleados directos. Sin embargo, en la zona existen minas, talleres, proveedores, almacenes y diversas empresas que forman una red de abastecimiento vinculada a Altos Hornos de México. Esto derivó en un total de 70 mil trabajadores, lo que indica que una gran parte de la población dependía de la empresa.

Ancira, quien en febrero de 2021 fue imputado por un juez federal en el Reclusorio Norte por el delito de lavado de dinero, fue señalado de haber sobornado con 3.5 millones de dólares al entonces director de Pemex, Emilio Lozoya, con el objetivo de facilitar la venta de la planta de fertilizantes Agronitrogenados.

Después de ser arrestado en España y enviado de regreso a México, en abril de ese año, Ancira obtuvo su libertad al alcanzar un acuerdo de compensación de 218.6 millones 664 mil dólares por los perjuicios ocasionados a Pemex, monto que pagaría en cuatro cuotas.

Ancira no realizó el último pago de 12.6 millones de dólares que estaba programado para noviembre de 2023; no obstante, la empresa consiguió una extensión que debe cumplirse el 30 de noviembre de este año.

Desde abril de 2023, el empresario ha dejado de ser parte de la empresa, con Argenteam Creek Partners como el nuevo propietario, quien aportó 200 millones de dólares. No obstante, aún requiere inversiones adicionales por un total de 900 millones de dólares.

Frente a la quiebra, el gobierno de Coahuila se comprometió a brindar respaldo a los trabajadores y a la economía de Monclova.

En un anuncio, se comprometió a monitorear de cerca el proceso legal actual para garantizar que se respeten los derechos laborales de los trabajadores de AHMSA y que reciban los pagos que les corresponden. Además, se continuará trabajando para asegurar que, en cuanto las condiciones sean favorables, puedan reincorporarse a sus empleos.