Carlos Alcaraz arrolla a Shang en su debut en Shanghái
El tenista español Carlos Alcaraz ha hecho su debut de forma espectacular en el torneo de Shanghái (China), el penúltimo ATP Masters 1.000 de la temporada que se juega en pista dura. Este sábado, se impuso al jugador chino Juncheng Shang con un claro 6-2, 6-2, lo que le permite continuar sin derrotas en la actual gira asiática. Alcaraz, que se coronó campeón esta semana en el ATP 500 de Pekín después de vencer en la final al número uno del mundo, el italiano Jannik Sinner, ha llegado a la ciudad china en un excelente estado de forma. Durante el partido, dominó al jugador local y no perdió su servicio. Solo enfrentó una oportunidad de quiebre en el segundo set y logró romper el saque de su rival en dos ocasiones en cada set, cerrando el match en poco más de una hora y cuarto de juego. En la tercera ronda, se medirá al también chino Yibing Wu, quien hizo historia al ser el primer jugador de su país en ganar un título del circuito ATP, en Dallas 2022. "No estoy acostumbrado a competir contra jugadores más jóvenes que yo. Shang ha estado jugando a un buen nivel últimamente y ha conquistado su primer título ATP, así que seguramente seguirá ascendiendo en el ranking. Estoy contento de poder ganar este tipo de partidos. En la red me dijo que fue un placer compartir la pista. Es bonito que los jugadores más jóvenes expresen ese tipo de cosas", comentó Alcaraz tras el encuentro. Alcaraz busca hacerse con su sexto trofeo ATP Masters 1.000, lo que lo igualaría con el ruso Daniil Medvedev y el alemán Alexander Zverev, y desea convertirse en el primer español en ganar el certamen chino en modalidad individual, ya que solo han llegado a la final Rafa Nadal (2009 y 2017), David Ferrer (2011) y Roberto Bautista (2016). Por otro lado, Jaume Munar ha sido eliminado del torneo asiático tras perder ante el checo Jiri Lehecka (7-6(6), 6-4). El balear cedió el primer set en un tiebreak y en el segundo no pudo aprovechar las dos oportunidades de quiebre que tuvo, además de perder su servicio en el tercer juego, lo que fue suficiente para decir adiós a Shanghái.