Clima en la CDMX para el 29 de mayo, ¿a qué hora volverá a llover?
La predicción del clima, fundamentada en la supervisión y cálculos matemáticos, asiste en la anticipación de las condiciones atmosféricas en un lugar específico y hora determinada, utilizando diferentes aspectos como la temperatura, la humedad, la presión atmosférica, las precipitaciones y la velocidad del viento.
Desde hace muchos siglos se han llevado a cabo prácticas para predecir el clima, incluso antes de la era cristiana. Estas prácticas se basan en gran medida en la observación de los patrones de las nubes, el viento y la estación del año, aun así al principio no eran demasiado precisas.
La introducción de nuevas tecnologías, como las computadoras, ha permitido el desarrollo de modelos matemáticos precisos. Estos modelos se han vuelto fundamentales en diversas áreas, desde el transporte terrestre, marítimo y aéreo, hasta la agricultura, el turismo, la prevención de desastres, la salud pública e incluso las operaciones militares. Además, estos modelos también han hecho posible tomar decisiones cotidianas, como llevar un paraguas o elegir la ropa adecuada.
Aquí se presenta la situación meteorológica para las próximas horas en la Ciudad de México, específicamente para este miércoles:
Hoy, miércoles, hay un 65% de opciones de que llueva durante el día en la Ciudad de México, mientras que por la noche la probabilidad disminuye a un 6%.
Mientras tanto, habrá una cobertura de nubes del 51% durante el día y del 36% durante la noche.
La región tendrá una temperatura máxima de 28 grados y una mínima de 15 grados según las previsiones. Se espera que los rayos ultravioleta alcancen un nivel de hasta 14.
Durante el día se esperan ráfagas de viento de hasta 41 kilómetros por hora, mientras que en la noche se reducirán a 18 kilómetros por hora.
Puede parecer lógico que, debido a su ubicación y tamaño, la Ciudad de México tenga un clima subtropical homogéneo. No obstante, esto no es cierto, ya que cuenta con diferentes climas que van desde el templado al frío y húmedo, llegando incluso a la tundra alpina en las partes más elevadas del sur.
La Ciudad de México goza mayormente de un clima cálido y agradable, con una temperatura que oscila entre los 22 y los 27 grados. Durante los veranos, se presenta una cantidad significativa de lluvia, siendo los meses de junio, agosto y septiembre los de mayor registro de precipitaciones.
Durante la temporada invernal, en áreas elevadas como el Ajusco, las temperaturas acostumbran descender hasta los cero grados. En cambio, las alcaldías de Iztacalco, Iztapalapa, Venustiano Carranza y la Gustavo A. Madero, suelen caracterizarse por un clima seco y moderado.
Dentro de los archivos históricos, se destaca que la última vez que nevó en la ciudad ocurrió en 1967. Por otro lado, el registro de la temperatura más alta se lleva en el 9 de mayo de 1998, alcanzándose los 33.9 grados Celsius. Mientras tanto, la temperatura más baja registrada fue de -10 grados Celsius, sucediendo en el 10 de diciembre de 1972.
Debido al cambio climático, la capital está sufriendo los efectos de las contingencias ambientales recurrentes. Ahora mismo, la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema) está colaborando con la Cooperación Alemana al Desarrollo Sustentable (GIZ México) y la Iniciativa Climática de México (ICM) en la ejecución de una variedad de medidas enfocadas en la movilidad integrada y sostenible, la energía solar para la ciudad, la reducción de residuos, un mejor manejo del agua y la recuperación de ríos, la revegetación para el medio rural y urbano, la calidad del aire y la educación ambiental.
La diversidad biológica de México es impresionante, ya que gracias a su posición geográfica cuenta con una amplia gama de climas, lo que lo convierte en el hogar de aproximadamente el 12% de las especies del planeta. Este número incluye alrededor de 12,000 especies endémicas que solo se pueden encontrar en este territorio.
México se ubica en dos zonas climáticas distintas debido a su ubicación en el trópico de Cáncer. Por un lado, se encuentra en una zona tropical, mientras que por otro, disfruta de un clima templado. Sin embargo, gracias a la diversidad de sus océanos y relieves, estas zonas climáticas se fusionan y dan lugar a una amplia variedad de climas y tiempos.
Por lo tanto, no es sorprendente observar que en las zonas elevadas de Chihuahua las temperaturas fluctúen en el rango de -30 grados Celsius, mientras que en el desierto de Mexicali la temperatura suba a los 50 grados Celsius.
México posee una extensa área calurosa y lluviosa que se extiende por las llanuras costeras bajas del Golfo de México y el Pacífico. También hay regiones cálidas y húmedas que se encuentran en las planicies costeras del Golfo de México y el Océano Pacífico, en el istmo de Tehuantepec, en el norte de Chiapas y en la Península de Yucatán. Por otro lado, en la Sierra Madre Occidental y Oriental, en las cuencas altas de los ríos Balsas y Papaloapan, algunas partes del istmo de Tehuantepec, así como en Yucatán y Chiapas, el clima es seco. Asimismo, existen zonas templadas, principalmente en el territorio al norte del trópico de Cáncer, y semidesérticas al norte del Altiplano.
La temperatura promedio en el país es de 19 grados, sin embargo, en ciudades como Mexicali, Culiacán, Ciudad Juárez, Hermosillo, Torreón, Saltillo o Monterrey, las temperaturas elevadas son extraordinariamente extremas.
Cuando se mencionan las temperaturas extremas alcanzadas en México, se destaca el caso de San Luis Río Colorado, una localidad situada en Sonora que limita con el Gran Desierto de Altar en Baja California. Es así como el 6 de julio de 1966 se registró un aumento máximo de 58.5 grados, mientras que el 27 de diciembre de 1997, el municipio de Madero en Chihuahua alcanzó una temperatura mínima de -25 grados.
Los especialistas indican que a raíz del cambio climático, en los próximos años habrá una disminución en las lluvias anuales y una notable subida en las temperaturas en nuestro país. Además, se han reportado graves consecuencias para los productores agropecuarios debido a sequías e inundaciones extremas en años recientes. También, en temporada de calor se ha observado un incremento en el número de alertas ambientales en las urbes más importantes como Ciudad de México o Monterrey.