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En las últimas horas, Puerto Rico ha tomado el protagonismo en las conversaciones sobre las elecciones presidenciales en Estados Unidos por un motivo inesperado.
En esta ocasión, no se debió a un fenómeno natural, un corte de luz general o su grave crisis económica, motivos que normalmente hacen que la isla figure en las noticias de los medios estadounidenses. En cambio, todo surgió a raíz de un "chiste" realizado por el comediante Tony Hinchcliffe durante un mitin de campaña de Donald Trump celebrado este domingo en el Madison Square Garden de Nueva York.
Hinchcliffe, quien en su discurso también se mofó de otros latinos y realizó observaciones despectivas sobre palestinos, judíos y afroamericanos, describió a Puerto Rico como “una isla de desechos en el océano”.
Sus declaraciones desataron una oleada de protestas en los medios de comunicación y en las redes sociales, donde rápidamente políticos de ambos partidos, demócratas y republicanos, se pronunciaron para repudiarlas y expresar su respaldo a los puertorriqueños.
Asimismo, varias de las figuras más destacadas de la isla, como Bad Bunny, Jennifer López y Ricky Martin, compartieron mensajes de respaldo a la demócrata Kamala Harris con sus numerosos seguidores, que suman decenas de millones.
Frente a la presión, el equipo de campaña de Trump tomó distancia de las declaraciones de Hinchcliffe.
“Se trata de una broma y no representa la perspectiva del presidente Trump ni de su campaña”, afirmó Danielle Álvarez, asesora principal del exmandatario.
Tanto Trump como Harris están buscando con insistencia el apoyo del electorado latino, que podría ser determinante en estados importantes para las elecciones del 5 de noviembre.
En ciertos lugares, como Pensilvania, los puertorriqueños constituyen la mayoría de los votantes latinos.
Según Anthony Zurcher, corresponsal de la BBC en América del Norte, el mitin de Trump que se celebró este domingo estaba destinado a ser una exhibición de poder político en las etapas finales de la campaña presidencial.
"En cambio, el equipo de Trump se ha visto obligado a gestionar la situación".
De acuerdo con varios expertos, la "broma" de Hinchcliffe podría entorpecer las metas de Trump y los republicanos de ingresar a la Casa Blanca y obtener el control de ambas cámaras del Congreso de Estados Unidos.
Los Puertorriqueños En Estados Importantes
Miles de puertorriqueños han trasladado su residencia a Estados Unidos en los últimos diez años, buscando escapar de una grave crisis económica ocasionada por una enorme deuda pública y los estragos causados por varios huracanes.
A pesar de que los habitantes de la isla no tienen la posibilidad de participar en las elecciones presidenciales, aquellos que se trasladan a los Estados Unidos continentales sí pueden ejercer su derecho al voto al ser ciudadanos estadounidenses.
Se calcula que alrededor de 5,8 millones de personas de ascendencia puertorriqueña tienen derecho a votar el 5 de noviembre. Una gran parte de estas personas reside en estados clave para las elecciones, como Carolina del Norte, Georgia, Florida y Pensilvania.
En Florida, un bastión de apoyo para Donald Trump y el Partido Republicano, más de 1,1 millones de votantes puertorriqueños podrían tener un papel crucial en las elecciones para la legislatura estatal y el Congreso nacional.
Rick Scott, el exgobernador de Florida que aspira a ser reelegido como senador, así como los representantes republicanos del estado, María Elvira Salazar y Carlos A. Giménez, fueron de los primeros en expresar su desaprobación hacia el comentario de Tony Hinchcliffe, conscientes de las repercusiones que esto podría acarrear entre sus electores.
"Este chiste no tuvo éxito por una razón. No resulta divertido y no es verdad," comentó Scott.
“¡Los puertorriqueños son individuos asombrosos y ciudadanos estadounidenses extraordinarios!”, añadió.
Salazar expresó en X que se sentía “molesta” por el “comentario racista” del comediante, señalando que no “representaba los valores” de los republicanos.
Carlos A. Giménez calificó las declaraciones de Hinchcliffe como “totalmente impropias y de mal gusto”.
En Nueva York, un estado que tradicionalmente favorece al candidato demócrata en las elecciones presidenciales, se disputan en las votaciones de noviembre varios distritos que jugaron un papel clave en la conformación de la mayoría en la Cámara de Representantes federal en 2022.
Según The New York Times, "es posible que no exista un escenario de confrontación más significativo en la contienda por la Cámara de Representantes de este año que Nueva York".
Y en ese lugar viven alrededor de un millón de puertorriqueños, a quienes seguramente la "broma" de Hinchcliffe no les habrá causado ninguna risa.
Sin embargo, el análisis del comediante podría impactar de manera más costosa a los republicanos en Pensilvania, donde viven aproximadamente 450,000 puertorriqueños.
De acuerdo con las encuestas, este estado, que podría ser determinante para que Donald Trump o Kamala Harris consigan la presidencia, tiene el potencial de favorecer a cualquiera de los dos.
En 2020, Joe Biden obtuvo la victoria en Pensilvania con una diferencia de 82,000 votos, mientras que en 2016, Donald Trump se impuso por apenas 44,000.
Genera Un Contraste Con Harris
El domingo, unas pocas horas antes de que Tony Hinchcliffe hiciera su comentario, Kamala Harris estaba en un restaurante puertorriqueño en Pensilvania discutiendo su estrategia para fomentar la economía de la isla y acelerar su reconstrucción después del huracán María, que ocurrió hace 7 años.
Por una especie de coincidencia, la vicepresidenta también compartió un video en el que reafirmaba este mensaje y, además, mencionaba la participación de la administración Trump después del desastre.
De acuerdo con Harris, el presidente se mostró reacio a proporcionar asistencia a la isla después del huracán, que causó aproximadamente 4,000 muertes.
También rememoró el instante en que Trump arrojó rollos de papel toalla a un grupo de personas afectadas que estaban reunidas en una iglesia en Puerto Rico.
La campaña de la demócrata utilizó lo ocurrido en el mitin de Nueva York para enfatizar que hay una diferencia en la manera en que ambos se relacionan con la isla.
En sus plataformas sociales, Harris publicó un video de pantalla dividida donde se puede observar su mensaje acerca de Puerto Rico y la participación de Hinchcliffe en el Madison Square Garden.
Asimismo, el candidato a la vicepresidencia, Tim Walz, lanzó una fuerte crítica hacia el comediante durante una transmisión en la plataforma de Twitch, en compañía de la representante de origen puertorriqueño Alexandria Ocasio-Cortez.
"Así es como opinan de quienes tienen un ingreso inferior al suyo", comentó Ocasio-Cortez. "¿Quién es ese tonto?", agregó Walz.
En una elección donde los márgenes de triunfo son tan reducidos, un colectivo como el de los puertorriqueños podría marcar la diferencia, destacó el profesor de ciencia política Todd Landman de la Universidad de Nottingham en un análisis para The Conversation.
Por esa razón, ambas campañas han trabajado arduamente para obtener sus votos, comentó Landman.
"Si un número considerable de personas se siente ofendida por las declaraciones de Hinchcliffe, esto podría influir de manera importante en el resultado de las elecciones", afirmó el especialista.
"Es poco probable que el recuerdo se borre en solo unos días tras una elección", indicó el sociólogo Fernando Tormos-Aponte de la Universidad de Pittsburgh en una entrevista con la revista Time.
De acuerdo con Tormos-Aponte, lo ocurrido podría influir en otros colectivos que se consideran vulnerables y minoritarios en el país. Al sentirse identificados con los puertorriqueños, estos grupos podrían favorecer a los demócratas en las elecciones del próximo 5 de noviembre.
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