Ken Salazar afirma que la elección directa de jueces “es un riesgo para la democracia en México”
El embajador de Estados Unidos, Ken Salazar, expresó su desacuerdo con la propuesta de que los jueces y magistrados sean elegidos directamente por los ciudadanos, como propone la reforma judicial impulsada por el presidente, Andrés Manuel López Obrador. Durante una conferencia de prensa este jueves, el representante diplomático afirmó que la elección directa de jueces pone en peligro la democracia en México y manifestó su preocupación al respecto. Asimismo, Washington advirtió que esta iniciativa también afecta la relación comercial entre ambos países y reduce la confianza de los inversionistas.
Salazar afirmó que las democracias necesitan un Poder Judicial sólido, autónomo y transparente para funcionar correctamente. Esta es la postura más firme de Estados Unidos en contra de la reforma judicial, luego de meses de tensiones en la relación entre ambos países. El embajador explicó que llevar la elección de los jueces a las urnas puede dar lugar a una lucha política intensa y aumentar la influencia del narcotráfico en el sistema judicial. Además, señaló que las elecciones directas podrían facilitar que los carteles y otros actores malignos se aprovechen de jueces inexpertos con intereses políticos.
La postura del embajador, que ha optado por una actitud conciliadora para fortalecer su diálogo con López Obrador, evidencia la desconfianza que existe entre los inversores de Estados Unidos, el principal partner comercial de México, con respecto a la reforma judicial. Salazar indicó que la "confianza en el marco legal" del país es cruciál para los mercados y el sector privado. El diplomático alertó que las votaciones de jueces, programadas para 2025 y 2027 en caso de aprobarse la reforma, podrían generar "turbulencias" en temas como la integración económica de Norteamérica debido a que las discusiones sobre la elección popular se extenderían por años. También mencionó haber mantenido conversaciones con miembros del sector empresarial mexicano, quienes muestran "gran preocupación".
Salazar señaló la necesidad de una reforma en el Poder Judicial durante una conferencia de prensa en la Ciudad de México, mostrando mayor seriedad que en ocasiones anteriores. Afirmó que la elección directa y basada en motivos políticos de jueces no sería la solución para combatir la corrupción judicial ni para fortalecer el sistema judicial en general. El embajador advirtió sobre los riesgos de cambiar el proceso de selección de jueces, magistrados y ministros de la Suprema Corte, ya que podría resultar en la elección de candidatos menos calificados. Asimismo, expresó su desacuerdo con la idea de reducir los años de experiencia necesarios para optar a un cargo en el poder judicial.
Salazar expresó la importancia de establecer medidas de protección antes de llevar a cabo un cambio tan significativo con implicaciones en el Estado de Derecho. El embajador manifestó sus dudas sobre otras propuestas de reforma promovidas por López Obrador, como la desaparición de organismos independientes y reguladores. A pesar de las preocupaciones, señaló que esto se analizará más adelante y afirmó que es necesario que los organismos operen de manera efectiva, y aquellos que no cumplan, deberán ser modificados.
El representante de Canadá en México, Graeme C. Clark, también admitió que los inversionistas canadienses estaban inquietos. El diplomático señaló que la confianza era fundamental para fomentar el clima de inversión, aunque fue más cauto que Salazar. En declaraciones a Efe, manifestó que como diplomático era consciente de la importancia de no interferir en los asuntos de México y que ese no era su propósito.
Estados Unidos reiteró su respeto por la soberanía de México y espera que se tome en cuenta su postura en el tema. Tras expresar claramente su posición, el embajador destacó que la reforma tiene aspectos positivos, como establecer plazos para resolver conflictos legales, y aseguró que en Washington hay un alto optimismo por la próxima administración de la presidenta electa, Claudia Sheinbaum, que asumirá el cargo el 1 de octubre.
Todos están esperando con ansias el comienzo de la nueva legislatura en el Congreso el próximo 1 de septiembre. Se espera que la mayoría de Morena, el partido en el poder, junto con sus aliados, priorice la aprobación de cerca de veinte reformas propuestas por López Obrador. Después de las preocupaciones de los mercados financieros y tras su victoria en las elecciones de junio pasado, Sheinbaum decidió transmitir un mensaje de tranquilidad al principio, asegurando que la reforma judicial sería discutida ampliamente antes de ser aprobada, aunque ha expresado públicamente su respaldo a la enmienda.
Durante esta semana, la nueva presidenta se refirió a las preocupaciones de los inversionistas y al pesimismo de empresas como Morgan Stanley, que rebajó su recomendación sobre México y predijo que el proyecto de ley incrementaría el riesgo país. Sheinbaum aseguró que no hay motivo de preocupación, ya que quienes conocen el Poder Judicial son conscientes de los problemas de corrupción que existen ahí. Además, explicó que uno de los objetivos de la reforma es brindar mayor seguridad jurídica al sector privado.
Las oposiciones a la reforma también se encuentran en el interior. Alrededor de 1.400 jueces y magistrados se han unido a una huelga convocada por un sector de los trabajadores del Poder Judicial, en al menos 18 de los 32 Estados del país, de forma indefinida. López Obrador ha calificado la huelga como “ilegal” y la Secretaría de Hacienda amenazó en un comunicado con despedir y suspender el pago a quienes se sumen al paro, aunque el presidente negó por el momento que se llegue a ese extremo. A principios de septiembre, el debate sobre la Reforma Judicial se llevará al Congreso.
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