La sustancia: ¿Cuál es su significado y por qué es tan violenta?

La Nueva Película De Body Horror Hipnotiza Al Público

¿Has considerado alguna vez la posibilidad de ver una película que sea terrible, perturbadora y, al mismo tiempo, excepcional? Esa es la caracterización que muchos utilizan para referirse a La sustancia, la reciente película de Demi Moore que promete sorprenderte con su aguda crítica social y sus impactantes momentos de terror. Sin embargo, más allá de su impacto inicial, ¿cuál es el significado de la violencia en este filme? A continuación, te lo explicamos.

Tras cautivar a la crítica internacional en su presentación en el Festival Internacional de Cine de Cannes 2024, *La sustancia* se ha establecido como una de las películas más controvertidas y atractivas para disfrutar en lo que queda del año. Su reparto, que no solo sitúa a Margaret Qualley en el centro de atención mundial, sino que también marca el regreso de Julianne Moore a la pantalla grande, la convierte en una de las propuestas más interesantes; una representación de dos generaciones. Sin embargo, lo que realmente ha consolidado su estatus como un ícono entre quienes ya la han visto es su narrativa sólida y grotesca, que ofrece una reflexión profunda y perturbadora sobre la estética social.

En una entrevista reciente con ELLE, Coralie Fargeat, la creadora del guion y la dirección de La sustancia, compartió el origen de la idea para la película y, aún más relevante, qué efecto espera que produzca en el público a nivel global.

A sus 48 años y con una trayectoria bien establecida en el cine tanto francés como internacional, Fargeat parece encontrarse en un momento de incertidumbre y reflexión sobre su lugar en el mundo, así como sobre su futuro personal y profesional.

Con ideas como “esto ha llegado a su fin. Mi existencia ha concluido. Me eliminarán de la sociedad”, la directora señala que La sustancia surgió de la necesidad de reflexionar y dar a conocer un proceso de duelo que muchas personas, especialmente mujeres, experimentan en algún momento de su vida.

"Representó un hundimiento profundamente desalentador en mi vida personal", comentó Fargeat al referirse al proceso de duelo que la llevó a relatar la historia de Elisabeth Sparkles.

¿Qué Representa La Cinta Y Su Violencia?

Reconociendo su tristeza y el estigma que enfrentan las mujeres de mediana edad en la sociedad, Coralie buscó una forma genuina y contundente de expresar su sincero mensaje sobre ese momento decisivo en la generación.

Por eso, sin pensarlo dos veces y después de realizar la exitosa película de terror "Venganza", que contiene un trasfondo feminista, Fargeat se dio cuenta de que debía plasmar el temor y la violencia que experimentaba en ese momento a través de una historia singular y grotesca, utilizando el body horror para así ofrecer la mayor cantidad de escenas perturbadoras que se puedan ver en un filme.

"La agresión en la película representaba, en realidad, una manera de liberar toda la violencia que llevaba dentro. Experimenté la urgencia de manifestar mis sentimientos sobre la percepción que se tiene de uno mismo y la imagen corporal. Estás constantemente comparándote y valorando tu autoestima en base a eso. Entonces pensé: 'Este es el momento perfecto para utilizar el género de terror como medio para expresar esa violencia'", comentó durante la entrevista.

Tal como lo mencionó la directora, la única razón que la llevó a desarrollar esta historia fue la estética meticulosa, pulcra, luminosa y extremadamente detallada que se observa en cada toma, ya sea en los planos generales, primeros planos e, inclusive, en los movimientos de cámara que acompañan el desafiante recorrido entre Elisabeth y Sue.

Sin embargo, más allá de su apariencia, la trama de La sustancia oculta un significado más profundo y devastador, al menos en términos emocionales, para las mujeres a nivel global:

"La agresión en la película representaba, de verdad, una manera de liberar toda la violencia que llevaba dentro..."

Parece que la obra se presenta como una cinta que, a través del análisis y la reflexión humana, busca resaltar el profundo efecto que tienen los prejuicios, las críticas y los elevados patrones de belleza que han existido en la sociedad a lo largo de los años. Su propósito es hacer un llamado a la aceptación de la imperfección del cuerpo humano y del proceso de envejecimiento.

"En realidad, deseaba comunicar que ser mujer implica que tu cuerpo es visto como cualquier cosa menos natural en el ámbito público. Está en constante observación, juicio, análisis, fantasía y sexualización. No puedes hacer caso omiso a esto. También [determina] la manera en que se nos permite participar en el mundo", afirmó Fargeat.

Con esta interpretación, la directora francesa explicó que sus motivaciones no se limitan a representar de forma imaginativa y sombría el luto de la mediana edad, sino que también aspira a desafiar los tabúes sobre cómo deben verse las personas.

"[El mundo] funciona como una prisión inmensa que nos limita en nuestro espacio. Esa desigualdad está tan arraigada en nuestra cultura, y las herramientas de opresión que hemos interiorizado son las más contundentes. Para mí, era fundamental evidenciar esa realidad de la que todavía se evita hablar, exponiéndola de manera cruda, llena de vísceras, sangre y violencia, y decir: '¡Observen esto!'".

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Soy fotoperiodista y apasionado de los superhéroes. Recuerdo que un día fui al cine y sin darme cuenta quedé fascinado por las historias que descubrí. Desde entonces, tengo el deseo de escribir y compartir todo lo que experimento. Mi serie preferida es Volver al futuro, ya que me enseñó a tener fe en que “tu futuro aún no está definido”.