La interrupción de los servicios de Outlook y Teams de Microsoft muestra signos de recuperación | CNN
Nueva York (CNN) –– Microsoft anunció este lunes que está experimentando retrasos tras descubrir la razón detrás de una significativa interrupción en Outlook y Teams, así como al haber aplicado una solución al inconveniente.
El lunes por la tarde, la empresa comentó que había notado una recuperación y que los reportes de problemas en el sitio de monitoreo Downdetector habían caído considerablemente.
En su momento más crítico, Downdetector registró más de 5,000 incidencias reportadas por los usuarios, aunque estas cifras no capturan totalmente la magnitud de la interrupción.
"La empresa anunció en X más temprano que hemos iniciado la implementación de una solución que se encuentra en desarrollo en el área afectada. Mientras avanzamos con esto, estamos llevando a cabo reinicios manuales en un grupo de máquinas que no están operando correctamente."
Alrededor del mediodía, Microsoft indicó que la solución había llegado a "cerca del 98% de los entornos afectados", aunque los reportes en Downdetector continuaban en aumento. Es posible que las actualizaciones tarden en implementarse en los sistemas de los clientes.
No obstante, Microsoft indicó que esos reinicios estaban “progresando más lentamente de lo que se había anticipado para la mayoría de los afectados” y aún no había ofrecido un plazo estimado para solucionar el problema. A las 2 p.m., la empresa comunicó que seguía experimentando retrasos en su proceso de recuperación.
La interrupción ha generado dificultades para muchos empleados de oficina, aunque hay ciertos usuarios en EE.UU. en X que disfrutaron del breve parón antes del fin de semana del Día de Acción de Gracias.
Las interrupciones tecnológicas han causado impactos significativos en el mundo entero en el transcurso de este año, aunque el caso de Microsoft no ha sido tan extendido en comparación. Lo que se describió como la mayor interrupción en la industria de tecnologías de la información hasta la fecha, el fallo de software de CrowdStrike durante el verano, paralizó el tráfico aéreo, afectó a hospitales y generó pérdidas directas superiores a 5.000 millones de dólares para las empresas Fortune 500.