Consejos para disminuir el uso de la tecnología en los niños
En la actualidad, la era digital ha transformado la interacción dentro de las familias, trayendo consigo tanto ventajas como retos.
Aunque las pantallas ofrecen posibilidades para el ocio y la educación, su utilización desmedida puede generar efectos negativos en el desarrollo social, emocional y cognitivo, sobre todo en los más jóvenes.
Frente a esta situación, numerosos padres están en la búsqueda de opciones que ofrezcan un mejor equilibrio.
La psicóloga Elena de la Garza, quien trabaja con Educando en Red, enfatiza la importancia de reducir el tiempo que se pasa frente a las pantallas y de incentivar actividades en familia que refuercen los vínculos emocionales y propicien una relación más cercana con los hijos.
El Exceso Siempre Es Perjudicial
"No se busca demonizar las pantallas; son excelentes cuando se emplean de manera adecuada. Sin embargo, pueden volverse adictivas, por lo que es necesario establecer límites y mantener un equilibrio claro. Un uso excesivo puede impactar diversas áreas del desarrollo en la niñez", señala De la Garza.
La escasez de conexión física y emocional puede ocasionar problemas como la obesidad, trastornos del sueño y un incremento de la ansiedad. También restringe la habilidad de los niños para cultivar competencias sociales y emocionales.
De la Garza destaca la manera en que las pantallas pueden influir en el sistema de recompensas del cerebro, generando una adicción que resulta complicada de superar.
"La recompensa provoca un aumento en nuestros neurotransmisores y activa nuestro sistema de recompensas, lo que hace que incluso los adultos no queramos alejarnos de esa sensación."
Por esta razón, es aconsejable incentivar acciones que estimulen todos los sentidos (el tacto, la vista, el olfato), ya que contribuyen al desarrollo cognitivo y social en una fase en la que resulta fundamental.
Una de las estrategias para disminuir el tiempo que los niños pasan frente a las pantallas es incluirlos en actividades que fomenten su creatividad y habilidades motoras, tanto dentro como fuera de casa.
Promover actividades artísticas en el hogar es una gran manera de mantener a los niños apartados de las pantallas, utilizando objetos y espacios que ya se tienen de manera simple.
Se sugieren actividades sencillas, como jugar en el jardín o cultivar un huerto, que no solo ayudan a los niños a alejarse de las pantallas, sino que también les enseñan habilidades importantes.
Para De la Garza, una evocación de su infancia son las actividades de artesanía con papel maché y la exploración de colores. Esto le brindaba largas horas de entretenimiento, ya que se dedicaba a realizar experimentos de química con agua y diferentes tonos para combinarlos.
Según comentó, estas vivencias no solo resultan divertidas, sino que también fomentan el aprendizaje y estimulan la creatividad.
Las actividades en la naturaleza brindan a los niños la posibilidad de descubrir su alrededor, mejorar sus habilidades físicas y establecer vínculos afectivos con el medio ambiente.
La psicóloga señala que la conexión con el suelo y los elementos de la naturaleza es fundamental para un adecuado desarrollo sensorial en los niños, promoviendo su capacidad de empatía. Explica que "cuanto más pensamos, más nos vinculamos", y que el entorno natural puede estimular la creatividad.
Para que estas acciones produzcan un efecto beneficioso en los niños, la doctora enfatiza la relevancia de que los padres participen de manera activa.
"La cuestión principal es la conexión, esa capacidad creativa que desarrolla el niño y que se convierte en una característica social y de comunicación. Aprenderá observando el rostro de sus padres, las expresiones que hacen y las emociones auténticas que transmiten. Estas interacciones no se pueden experimentar a través de una pantalla."
"Los padres no necesitan estar al pendiente todo el día, pero sí es importante que supervisen y se fijen en lo que su hijo realiza en las pantallas."
Por último, De la Garza sostiene que lo primordial es que los niños perciban amor, protección y seguridad en su entorno familiar, un sentimiento que no puede ser sustituido por una pantalla.
Con datos de Reforma.