Día del Árbitro: ¿por qué se celebra el 11 de octubre?

2 día atrás
Que se celebra el 11 de octubre

Este viernes 11 de octubre se celebra una ocasión muy importante para los aficionados al fútbol, ya que se conmemora a nivel mundial el Día del Árbitro.

El 11 de octubre se conmemora a nivel mundial el Día Internacional del Árbitro de Fútbol, una ocasión significativa para quienes se encargan de hacer cumplir las reglas del juego en el fútbol en todo el mundo.

Aunque no se conocen con certeza los orígenes de esta celebración, se cree que la primera vez que se designó a un árbitro en un partido ocurrió un 11 de octubre. Por esta razón, los árbitros de fútbol en todo el mundo celebran su día en esta fecha.

Día Del Árbitro: ¿qué Hace Un árbitro?

En el fútbol, el árbitro es el encargado de garantizar que se respeten las normas del juego a lo largo de un partido, las cuales han sido dictadas por la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA). Su labor también incluye cronometrar el tiempo del encuentro y documentar todo lo que suceda durante el mismo. Este oficial tiene la autoridad para hacer cumplir el reglamento antes, durante y después del partido.

El uniforme del árbitro debe ser de un tono distinto al de los jugadores que participen en el encuentro. El árbitro principal cuenta con la colaboración de dos árbitros asistentes, quienes se colocan a lo largo de las bandas del campo. En el fútbol profesional también se encuentra el cuarto árbitro, quien actúa como reemplazo de los otros tres en caso de que alguno se lesione, y tiene la responsabilidad de asistir al árbitro principal registrando los cambios, las tarjetas amarillas y las expulsiones de los futbolistas.

Día Del Árbitro: ¿qué Poderes Tiene?

Es la figura más importante en el ámbito deportivo para dirigir los encuentros, por lo que jugadores, entrenadores, directivos y delegados deben obedecer sus instrucciones y respetar sus determinaciones. Solo él cuenta con la autoridad para imponer sanciones y expulsar a los infractores, pudiendo recibir solamente la recomendación de los árbitros asistentes y del cuarto árbitro si surge alguna duda; sin embargo, la decisión final siempre corresponde al árbitro principal.

Utilizando su silbato, da comienzo y finaliza el juego. Además, es quien autoriza el inicio del partido, el cierre de la primera y segunda mitad, así como los tiempos de descuento. Su responsabilidad incluye validar los goles y señalar las infracciones, con la facultad de amonestar o expulsar a los jugadores si estima que las faltas son violentas o deliberadas, así como en caso de que infrinjan las reglas de manera reiterada.

Las decisiones del árbitro son irrevocables; sin embargo, él es el único que puede alterarlas si piensa que se ha equivocado o si lo considera necesario, siempre y cuando el juego no haya sido reanudado o el partido concluido.

Es responsabilidad del árbitro verificar que la pelota utilizada cumpla con los requisitos establecidos por las regulaciones. El juez del partido tiene la facultad de detener el juego si un jugador resulta lesionado, permitiendo así la entrada del personal médico al terreno de juego. También puede autorizar que el jugador sea retirado del campo para recibir una evaluación y atención más completa.

Finalmente, el árbitro no debe permitir que individuos ajenos al partido accedan al terreno de juego. Además, al concluir el encuentro, debe presentar un informe detallado de lo sucedido, conocido como acta arbitral, que incluya lo ocurrido antes, durante y después del evento, a las autoridades pertinentes.

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