Estos son los cinco grupos criminales que se disputan el control del estado de Querétaro

2 día atrás
Queretaro

Estos son los cinco grupos delictivos que intentan apoderarse de Querétaro. CUARTOSCURO/Infobae)

En Querétaro, la noche del sábado 9 de noviembre, un tiroteo en el bar Los Cantaritos, situado en el bulevar que circunda el centro histórico, resultó en la muerte de 10 personas y dejó 13 heridos. Este ataque, llevado a cabo por un grupo de hombres armados que llegaron en una camioneta y abrieron fuego contra los asistentes, ha suscitado preocupación acerca del creciente poder de las organizaciones delictivas en la región.

De acuerdo con Juan Luis Ferrusca Ortiz, quien se encarga de la seguridad en Querétaro, “todo el dispositivo de seguridad se ha activado para localizar a los criminales”. Además, se ha reconocido el automóvil empleado en el ataque, el cual fue quemado por los agresores con el propósito de eliminar pruebas.

El asalto ha revelado la actividad de al menos cinco cárteles en Querétaro, que intentan dominar operaciones relacionadas con el narcotráfico, la extorsión y el robo de combustible en la región.

Según información reciente de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), estos grupos han estado activos en Querétaro durante varios años, y su forma de operar se asemeja a los atentados en bares y locales nocturnos en el estado vecino de Guanajuato.

Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG): Uno de los cárteles más fuertes y violentos de México, tiene una presencia confirmada en Querétaro. Este grupo, encabezado por Nemesio Oseguera Cervantes, apodado “El Mencho”, frecuentemente recurre a tácticas de mucha violencia y ha ampliado su dominio en diversas áreas del Bajío. En Querétaro, se le asignan actividades relacionadas con el narcotráfico en pequeña escala, extorsiones y la infiltración en bares y lugares de entretenimiento como Los Cantaritos, con el objetivo de controlar el tráfico de drogas en zonas de alta concurrencia.

2. Los Caballeros Templarios: Este grupo, que tiene sus raíces en Michoacán, ha ampliado su influencia a Querétaro, donde están involucrados en actividades de extorsión y narcotráfico. A pesar de que su poder se ha reducido en los últimos años, todavía operan a través de alianzas con grupos locales y se enfocan en el cobro de “derecho de piso” en diversos municipios del estado. Se ha identificado su presencia en áreas tanto urbanas como rurales de Querétaro, donde también se dedican a la venta de drogas al menudeo.

3. Cártel de los Beltrán Leyva: Lo que persiste de este grupo cuenta con células operativas en esa región. Esta agrupación delictiva se enfoca principalmente en el tráfico de sustancias ilegales, el secuestro y la extorsión. Gracias a su organización descentralizada, el cártel ha logrado establecer su poder en varios municipios.

4. El Cártel de Santa Rosa de Lima (CSRL), que tiene su origen en Guanajuato y es famoso por dedicarse al robo de combustible (huachicol), ha ampliado sus actividades hacia Querétaro gracias a su cercanía geográfica y a la presencia de ductos de PEMEX en la zona. A pesar de que su líder inicial, José Antonio Yépez Ortiz, conocido como "El Marro", fue arrestado en 2020, el cártel se encuentra debilitado pero continúa en funcionamiento.

5. El Cártel del Golfo, que tiene sus raíces en Tamaulipas, ha persistido en el estado en los últimos años, centrándose en el tráfico de drogas a pequeña escala y en actividades de extorsión. Mediante colaboraciones con grupos locales, esta organización ha logrado establecerse en áreas urbanas y comerciales, con la meta de ampliar su red de distribución de estupefacientes en la región del Bajío, enfrentándose a cárteles de mayor relevancia.

David Saucedo, experto en seguridad, examinó el ataque durante una entrevista con Radio Fórmula, destacando que Querétaro ha visto un incremento en la violencia en los últimos dieciocho meses, con situaciones parecidas a las que se presentan en el estado vecino de Guanajuato.

El experto indicó que estos ataques tienen como objetivo "intensificar la situación" y propuso que el Cártel de Santa Rosa de Lima podría estar involucrado en este hecho como una estrategia para desestabilizar al CJNG, que ha tratado de extender su poder en Querétaro desde que la influencia del CSRL ha empezado a disminuir.

Saucedo destacó que, al revisar los videos del asalto en Los Cantaritos, se puede ver que los agresores no tenían un blanco concreto en el bar, sino que realizaron disparos al azar.

“No existía ningún anillo de protección alrededor de los asistentes ni seguridad en los alrededores; el ataque parece haber sido planeado para causar el mayor número de víctimas posible”, comentó Saucedo, describiéndolo como un acto de “narcoterrorismo” con la intención de sembrar el miedo en la sociedad y ejercer presión sobre las autoridades.

Asimismo, el analista señaló que el método de operación observado —con el automóvil dejado atrás y incendiado para eliminar huellas— indica la participación de asesinos a sueldo, quienes están probablemente vinculados al Cártel de Santa Rosa de Lima.

Los delincuentes dejaron atrás e incendiaron la camioneta en el municipio de El Marqués, “una área dominada por la mafia local y el Cártel de Santa Rosa de Lima”, señaló Saucedo. Este grupo, que tiene su origen en Guanajuato y conexiones en Querétaro, es reconocido por llevar a cabo ataques en sitios concurridos como bares y restaurantes.

Hasta hace poco, Querétaro se consideraba una de las regiones más seguras de México; sin embargo, la influencia del crimen organizado ha comenzado a alterar esta situación.

Saucedo mencionó que la "barrera natural" que mantenía a Querétaro en una posición relativamente segura era el dominio del Cártel de Santa Rosa de Lima en Guanajuato, un grupo que actuaba como un freno ante la expansión del CJNG en la zona. No obstante, el debilitamiento del CSRL en años recientes ha permitido la entrada de cárteles como el liderado por El Mencho y los Beltrán Leyva, que actualmente compiten por el control del territorio queretano empleando tácticas violentas.

La situación en Querétaro, que hasta ahora mantenía una especie de "equilibrio pacífico entre cárteles", muestra un fenómeno de descomposición del control territorial parecido al que ya se observa en estados como Guanajuato, Zacatecas y Michoacán. Esto indica que la confrontación entre grupos delictivos podría intensificarse si las autoridades locales y federales no logran restablecer el orden.

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