¿Quién es Rafael Inclán, el polémico actor que lanzó comentario misógino contra Claudia Sheinbaum?

2 día atrás
Rafael inclan

Un actor mexicano con una extensa carrera en cine, teatro y televisión causó controversia al dirigirse de manera despectiva hacia la nueva presidenta.

Rafael Inclán, un actor mexicano con más de cincuenta años de trayectoria, se ha visto envuelto en una polémica tras realizar un comentario misógino acerca de Claudia Sheinbaum, la presidenta de México, durante su presencia en una alfombra roja el pasado mes de junio.

Con una trayectoria de más de 90 películas, entre las que se encuentran varias del "cine de ficheras", así como en telenovelas como "Maleficio" (su nueva versión), "Qué le pasa a mi familia", "Mi marido tiene familia" y "La pícara soñadora", entre otras, Inclán se expresó de forma despectiva sobre la nueva presidenta, lo que provocó una avalancha de críticas en las redes sociales.

Inclán, junto al comediante Luis de Alba, compartió su perspectiva sobre la evolución de la comedia, señalando que ya no se puede tratar cualquier tema. No obstante, lo que realmente captó la atención fue su comentario acerca de Sheinbaum: “Pronto tendremos a una ama de casa durante seis años”, dijo entre risas. A pesar de que Luis de Alba intentó aclarar a quién se refería, Inclán manifestó no estar al tanto, “no resido aquí”, aunque su alusión fue evidente.

Rafael Inclán, originario de Mérida, Yucatán, nació en 1941 y es reconocido como una de las personalidades más emblemáticas del denominado "cine de ficheras" en México, un estilo cinematográfico que gozó de gran popularidad en las décadas de 1970 y 1980.

Este estilo de cine, que se distingue por su contenido sexualizado y su humor fundamentado en juegos de palabras, consolidó a Inclán como uno de sus principales representantes, con filmes como “Bellas de noche”, “Las golfas”, “El alburero” y “Las cariñosas”. A lo largo de su trayectoria, ha intervenido en más de 90 producciones cinematográficas.

Aparte de su participación en el cine, Inclán se ha hecho notar en la televisión mexicana, actuando en telenovelas como “Rosa salvaje”, “La pícara soñadora”, “Rebelde” y “Mi marido tiene familia”. Además, ha estado involucrado en el teatro, recibiendo elogios por su interpretación en “El avaro”, una obra de Molière.

Inclán forma parte de una familia de intérpretes. Es primo de Alfonso Zayas, otro referente del cine de ficheras, y de Raúl Padilla “Chóforo”, además del actor de doblaje Alfonso Obregón.

El comentario de Rafael Inclán acerca de Claudia Sheinbaum ha sido considerado misógino en las redes sociales, donde los usuarios han destacado la falta de respeto hacia la primer mujer que asumirá la presidencia de México.

Este tipo de manifestaciones son catalogadas como discriminatorias de acuerdo con la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia (LGAMVLV), la cual define la misoginia como una actitud de desprecio hacia las mujeres.

Aunque Inclán trató de minimizar lo que dijo, la repercusión fue instantánea. La furia aumentó al evocar su vinculación con un cine que ha sido constantemente señalado por desvalorizar a las mujeres.

Después de que el comediante Rafael Inclán hiciera un comentario despectivo llamando a Claudia Sheinbaum “ama de casa” en tono de burla, la presidenta de México reaccionó durante su conferencia de prensa el jueves 3 de octubre en Palacio Nacional. Sheinbaum enfatizó la necesidad de eliminar la discriminación y resaltó la relevancia del trabajo que llevan a cabo las trabajadoras del hogar en el país.

“En las redes sociales aparece constantemente una palabra que se utiliza para referirse a las empleadas del hogar, y es realmente inaceptable. Esa terminología pertenece a épocas como el Porfiriato o la Colonia; estas mujeres son trabajadoras del hogar que realizan un labor valioso, y es fundamental que les brindemos el reconocimiento que merecen, así como su acceso a la seguridad social. Por eso, a todas las mujeres de México y al pueblo de nuestro país, les haremos justicia”, enfatizó la presidenta.

En su discurso, Sheinbaum desaprobó el uso de la palabra “sirvienta”, considerándola “horrible” y un vestigio de tiempos anteriores, en especial del Porfiriato y la Colonia. La presidenta subrayó que las trabajadoras del hogar llevan a cabo una labor digna y que su administración se compromete a continuar reconociendo sus derechos, incluyendo el acceso a la seguridad social de manera obligatoria.

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