Sismo de magnitud 4.3 con epicentro en San Felipe

Este 14 de febrero a las 22:49 hora local (4:49 UTC), el Servicio Sismológico Nacional (SSN) dio a conocer que se registró un sismo de magnitud 4.3 en las cercanías de San Felipe.

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Según los datos iniciales, el sismo tuvo lugar a una distancia de 45 km al noreste de la ciudad, ubicada en Baja California. Se registró una profundidad de 2 km y los habitantes de la zona percibieron el temblor.

Cuando hay un terremoto significativo, el Cenapred sugiere no creer en chismes o información errónea y sólo buscar datos en fuentes confiables, como las instituciones de Protección Civil, ya sean municipales, estatales o nacionales.

Tal vez te resulte interesante saber que se ha producido un terremoto de intensidad 4.2 cuyo epicentro se encuentra en Loreto.

Después de un terremoto, revisa tu casa para detectar cualquier daño posible, solo usa tu teléfono celular en situaciones de emergencia, verifica si hay fugas de gas antes de encender cualquier cerilla o vela, y no olvides que las réplicas del temblor son posibles, por lo que debes estar atento.

Antes de un terremoto, también es posible llevar a cabo ciertas acciones preventivas. Por ejemplo, elabora un plan de protección civil, realiza simulacros de evacuación, identifica las áreas seguras en tu hogar, escuela o lugar de trabajo y prepara una bolsa de emergencia.

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Cuando ocurre un sismo mantén la serenidad y busca un lugar seguro, manteniéndote alejado de objetos que puedan caerse. Si te encuentras en un vehículo, detente y evita estar cerca de edificios, árboles y postes. En caso de estar en la costa, alejarse de la playa y busque refugio en zonas elevadas.

Es importante señalar que México siempre corre el riesgo de sufrir un terremoto de gran escala, tal como ocurrió en los meses de septiembre en 1985 y 2017. Estos sucesos causaron tragedias y, aunque son los más conocidos, no han sido los mayores en términos de magnitud registrados en el país.

El 28 de marzo de 1787, un Oaxaca de la época colonial fue sacudido por el terremoto más severo que se ha registrado en lo que actualmente es México. Con una magnitud de 8.6, un tsunami le siguió invadiendo la costa más allá de los 6 kilómetros.

En 2009, el Cires realizó una investigación para profundizar en los sucesos de 1787. Se propuso la posibilidad de que un sismo de magnitud superior a 8.6 grados pudiera suceder pronto, con epicentro en la zona costera de México y Centroamérica. Es importante destacar que esta zona, llamada Brecha de Guerrero, tiene antecedentes geológicos que respaldan esta teoría.

No obstante, la intensidad reducida de un temblor no siempre garantiza que los inmuebles y las estructuras se vean apenas afectados. Esto quedó evidenciado con los sismos que sacudieron la Ciudad de México en 1985 y 2017, los cuales ocasionaron una destrucción masiva y cambiaron radicalmente la vida de sus habitantes.

El 19 de septiembre de 1985 ocurrió un sismo de 8.2 grados, originado en Guerrero. Fue a las 07:19 horas locales (13:19 UTC). Se creyó que no habría otro de tanta magnitud, pero ocurrió un sismo parecido exactamente 32 años después.

En el año 2017, un terremoto se produjo a las 13:14 hora local (18:30 UTC) en la frontera entre los estados de Puebla y Morelos, resultando en 369 muertes en la región central de México.

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