Ometepec registra sismo de magnitud 4.2
El 14 de febrero a las 17:32 horas, la población de la ciudad de Ometepec fue sorprendida por un temblor de magnitud 4.2 y una profundidad de 3.9 kilómetros. El evento ocurrió en horario local y se registró a las 23:32 UTC.
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Según la información preliminar proporcionada por el Servicio Sismológico Nacional (SSN), el epicentro del movimiento se localizó a una distancia de 92 km al suroeste de la población en cuestión, perteneciente al estado de Guerrero.
En caso de que se produzca un terremoto de gran magnitud, el Cenapred solicita a la población que evite creer en rumores y noticias falsas, y solo se informe por medio de fuentes oficiales, como las autoridades de Protección Civil de los distintos niveles de gobierno.
Una noticia que podría llamar tu atención es el terremoto de 4.2 grados en la escala de Richter, que tuvo lugar en Loreto.
Después de un terremoto, revisa tu hogar en busca de posibles afectaciones, utiliza tu teléfono solo en situaciones de emergencia, no enciendas fósforos o velas hasta que te asegures de que no hay fugas de gas, y ten en cuenta que pueden ocurrir réplicas del movimiento telúrico, por lo que es crucial mantenerse alerta.
Antes de que ocurra un terremoto, es recomendable que tomes algunas precauciones, tales como: elaborar un plan de seguridad civil, practicar evacuaciones mediante simulacros, identificar sitios seguros dentro de tu hogar, escuela o sitio de trabajo, y preparar una bolsa de emergencia.
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Cuando haya un terremoto, es importante que te mantengas sereno y busques un lugar seguro para resguardarte. Evita acercarte a objetos que puedan desprenderse y si estás en un automóvil, estaciona el vehículo alejado de edificios, árboles y postes. En caso de que estés en la costa, es preferible que te alejes de la playa y te refugies en áreas elevadas.
En México hay una región con mucha actividad geológica, lo que significa que el país está en peligro constante de experimentar terremotos. Los sismos de 1985 y 2017 son evidencia de esto, ya que causaron mucho daño, aunque no fueron los más fuertes en la historia del país. Aún así, estas catástrofes son recordadas por muchos mexicanos y personas de otros países.
El sismo más poderoso registrado en la historia de lo que ahora conocemos como México se originó en Oaxaca. El 28 de marzo de 1787, se produjo una sacudida con una fuerza de magnitud 8.6. No solo hubo temblores, sino que también hubo un tsunami que avanzó hasta 6 kilómetros tierra adentro, mostrando la furia del mar.
Según los expertos del Cires, es probable que se repitan situaciones similares en un futuro cercano. Estas conclusiones surgen de un estudio de 2009 que analizó el evento mencionado. Se sugiere que en las costas de México y Centroamérica podrían ocurrir terremotos de una magnitud similar, debido a que esta región tiene un alto potencial para eventos geológicos por su ubicación en la Brecha de Guerrero.
No obstante, no se requiere una intensidad tan alta para generar desorden. Los habitantes de México tienen recuerdos de temblores menos intensos registrados en 1985 y 2017. En esos momentos, tanto la ciudad capital como otros estados quedaron sin movimiento por las impactantes consecuencias de esos movimientos sísmicos.
El sismo del 19 de septiembre de 1985 se registró a las 7:19 am en la zona horaria local (13:19 UTC), alcanzando una magnitud de 8.2 y con su epicentro en el estado de Guerrero. Tras este devastador evento, muchos supusieron que no volvería a repetirse algo similar, sin embargo, exactamente 32 años después, volvió a suceder.
En el año 2017, un terremoto ocurrió a las 13:14 hora local (18:30 UTC) en la frontera entre los estados de Puebla y Morelos. Este evento trágico produjo un saldo total de 369 víctimas humanas.
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