La familia y los amigos juegan un papel fundamental en la prevención de adicciones

4 hora atrás
Sistema nervioso

Con la finalidad de resaltar la relevancia de las interacciones sociales en los individuos y su efecto en los mecanismos de motivación, recompensa y defensa, que a su vez afectarán sus conductas, se llevó a cabo la conferencia “En la adicción a sustancias ¿Qué tiene que ver el amor?” durante la 9ª Feria del Libro de Ciencias de la Salud. Esta charla fue ofrecida por el doctor Óscar Prospéro García, académico e investigador del Departamento de Fisiología de la Facultad de Medicina de la UNAM.

Sistema nervioso - Figure 1
Foto Gaceta FacMed

En su exposición, el doctor Prospéro García destacó que el sistema de motivación y recompensa es una función del sistema nervioso central que nos lleva a repetir acciones que nos resultaron agradables en el pasado, guiando nuestro comportamiento hacia estímulos que generan placer. Entre estos estímulos se encuentran la comida, el sexo y las drogas. No obstante, estas últimas activan este sistema de manera continua y su uso frecuente provoca tolerancia, lo que significa que ya no generan el mismo efecto con la misma cantidad, por lo que se requiere de mayor cantidad para conseguir el resultado esperado.

"La compañía de amigos y familiares nos brinda respaldo, nos motiva y estimula nuestro cerebro para que funcione de manera adaptable. El apoyo social refuerza nuestro sistema de recompensa; cuanto más cariño nos ofrecen nuestros seres queridos, mejor nos sentimos".

Sistema nervioso - Figure 2
Foto Gaceta FacMed

Por otro lado, el sistema de defensa genera en nosotros sentimientos de miedo y ansiedad. Cuando se activa, nos resguarda de los estímulos que enfrentamos. Se ha observado que los niños que crecen en ambientes desatendidos, expuestos a abusos verbales, físicos o sexuales, tienden a tener un menor autocontrol y niveles más altos de miedo y ansiedad. Estas modificaciones en el cerebro los hacen más propensos al consumo de sustancias.

El doctor Prospéro García llegó a la conclusión de que el cerebro es fundamentalmente social y adaptable. Las conexiones neuronales y la actividad de los receptores se transforman a medida que acumulamos experiencias, vivimos diferentes situaciones y cultivamos amistades. En esencia, cuando una persona se siente valorada o aceptada, su bienestar se ve favorecido; sin embargo, si se siente rechazada, puede enfrentar un aislamiento social, lo que puede desembocar en soledad, vulnerabilidad, ansiedad, trastornos del sueño y el consumo de sustancias perjudiciales. Según él, "la verdadera fortaleza de una persona no se encuentra en su fuerza física ni en su inteligencia, sino en la calidad de sus amistades".

Sistema nervioso - Figure 3
Foto Gaceta FacMed
Leer más
Noticias similares
Los noticias más populares esta semana