Zamora Montemayor: un estratega de la educación y el deporte
A pocas horas de la Gran Final de la Organización Nacional Estudiantil de Fútbol Americano, Antonio Zamora Montemayor no solo prepara la táctica de sus Auténticos Tigres, sino que también evalúa trabajos finales en su rol como docente en la Facultad de Ingeniería Mecánica y Eléctrica (FIME).
Vestido de manera formal y usando gafas, el académico dirige el Laboratorio de Física 4 durante las mañanas, mientras que unas horas más tarde, se cambia a pantalones cortos y gorra para dirigirse al campo de juego del Estadio Gaspar Mass.
Cada día, Zamora Montemayor se toma un momento para integrar sus dos grandes pasiones: ser instructor tanto en el aula como en el terreno de juego.
Para mí, hay dos actividades que realmente me entusiasman: contribuir a la educación académica y al desarrollo deportivo. Es fundamental organizarnos para poder dedicar tiempo a ambas. Debemos planificar las clases, realizar las revisiones y, por supuesto, cumplir con nuestra función como entrenadores de Auténticos Tigres.
“No se puede pasar por alto ningún detalle. Es fundamental tener todo listo para orientar de la mejor forma a los jóvenes”, declaró quien posee un doctorado en educación.
Educar A Través Del Ejemplo
Todavía era un atleta de la Liga Mayor y “El Jefe” ya asumía responsabilidades docentes como profesor, y ha continuado en ese rol por más de veinte años en FIME.
La filosofía de Antonio Zamora se basa en la educación a través del ejemplo, y ese es el objetivo que busca llevar a cabo con sus estudiantes. Les anima de manera constante a destacarse tanto en el aula como en el campo de juego.
Hemos intentado dar un buen ejemplo para que ellos se den cuenta de que es posible equilibrar el deporte con el estudio. Al hacerlo nosotros, validamos las expectativas que les planteamos.
Con una agenda repleta, entre evaluar los proyectos finales y desarrollar la táctica para competir por el campeonato de la ONEFA, el director técnico está atravesando una semana muy agitada.