La realidad de los perros de asistencia en España: "Fue la mejor decisión de mi vida y gracias a él sigo viva"
Cristina ha estado viviendo con Baileys, un golden retriever, desde hace dos años. Este perro le brinda un apoyo invaluable para sentirse más segura, especialmente al caminar por la calle. Desde su nacimiento, Cristina ha tenido parálisis cerebral, lo que ha limitado principalmente su movilidad en las piernas. Su historia es interesante, ya que tanto ella como su esposo siempre habían tenido un gran temor hacia los perros. "Durante unas vacaciones, vimos pasar un hermoso golden y me hizo reflexionar sobre la posibilidad de que, en vez de depender de ayudas ortopédicas, podría compartir mi vida con uno que me asista en mis tareas diarias", comparte con RTVE.es.
A partir de ese instante, la existencia de su familia dio un giro irreversible.
En España, en la actualidad, existen cinco categorías de perros de ayuda. DISCAN.
Los perros de apoyo han avanzado para ser aliados fundamentales en la vida de numerosas personas, ofreciendo ayuda en diversas áreas, que abarcan desde la movilidad hasta la identificación de enfermedades. Aunque tienen derecho a acceder a la mayoría de los espacios públicos y medios de transporte, todavía se encuentran con dificultades debido a la falta de conocimiento y concienciación sobre las leyes que los protegen. Esto puede resultar en que se les impida el ingreso. Además, las variaciones en la normativa entre las distintas comunidades autónomas provocan inconsistencias en la aplicación de sus derechos.
"Me Brinda La Confianza Para Cruzar"
En España, se reconocen actualmente cinco categorías de perros de asistencia, aunque su aceptación y regulación pueden diferir según la comunidad autónoma. Según lo que indican desde DISCAN, es necesario que la persona cuente con un grado de discapacidad del 33% (en la mayoría de los casos) y se dirija a una organización acreditada para el entrenamiento. Este proceso se lleva a cabo en diversas etapas: en primer lugar, se elige un cachorro y se le socializa en diferentes ambientes. A continuación, se le enseña obediencia básica antes de comenzar un adiestramiento específico para las tareas que deberá llevar a cabo. Posteriormente, se empareja al perro con el usuario, trabajando juntos para asegurar una correcta adaptación. Por último, se realiza un seguimiento regular para ajustar y mantener el rendimiento del animal.
Clases de perros de apoyo oficialmente reconocidas en España.
En el caso de Cristina, la pandemia prolongó considerablemente el proceso, aunque desde el inicio tuvieron la oportunidad de visitar a Baileys para abordar el miedo. Este golden ha sido adiestrado para acompañar a Cristina a su propio ritmo, ayudándola a levantarse en caso de caídas y brindándole apoyo al subir y bajar escaleras. "Además, me recoge objetos del suelo y, sobre todo, me ofrece seguridad al cruzar la calle", comenta. No obstante, hay que tener en cuenta que los perros de asistencia no están disponibles las 24 horas, solo cuando llevan el arnés o un distintivo correspondiente.
Un programa de la ONCE ofrece la oportunidad de acoger a uno de sus cachorros con el fin de entrenarlo como perro guía.
"Se le ha instruido que, al llevar el arnés, debe comportarse como un perro de servicio, pero no es insensible. El hecho de que alguien se acerque a acariciarlo puede distraerlo." Esta acción, como enfatiza Cristina, puede ocasionarle una caída, algo que la gente no siempre considera.
Perros Con Olfato Para Protección
Manuel Gavilán ha estado promoviendo durante años, a través de conferencias y plataformas digitales, la relevancia del perro de asistencia. Aslan, su fiel compañero de cuatro patas, es un labrador de color chocolate que se convirtió en el primer perro reconocido como animal de alerta médica en Andalucía, gracias a su adiestrador Felipe Villanueva, oriundo de Granada.
Manuel ha lanzado un libro titulado "Aslan Alerta Médica, mucho más que un perro", en el que ha recopilado información valiosa sobre los perros de asistencia, basándose en su propia historia y tocando diversos temas en relación con su vida cotidiana junto a Aslan. Asimismo, ha creado una canción llamada "Latido Fiel" y un cuento que actualmente está en proceso de ilustración, con la meta de amplificar su mensaje y conectar con las generaciones más jóvenes. "Mi intención es distribuir estos materiales de forma gratuita en las escuelas y destinar las ganancias a causas sociales", explica a RTVE.es.
Imagen proporcionada por Manuel Gavilán al lado de Aslan.
En 2012, experimentó un episodio de pancreatitis y, posteriormente, le realizaron una extirpación total del páncreas, lo que de inmediato le causó diabetes al no poder producir insulina. Estos perros son entrenados para detectar el "olor diana", que se relaciona con cambios fisiológicos asociados a condiciones médicas, como alteraciones en los niveles de glucosa, que generan variaciones en la concentración de compuestos orgánicos volátiles. Estos compuestos son los responsables del olor característico que activa al perro de alerta o aviso médico. Aslan, su perro, utiliza su sentido del olfato para cuidar de este granadino, logrando prevenir episodios de hipoglucemia con una anticipación de hasta 20 minutos. "Tuve que comenzar una nueva realidad y Aslan me apoya para avanzar en ella".
Ariel fue diagnóstico con el Síndrome de West, que se manifiesta a través de crisis epilépticas, cuando aún era un bebé. No obstante, Berta, su perra, le asiste al identificar estos episodios antes de que ocurran. Gracias a su sentido del olfato, la perra puede percibir en el aliento del joven de 16 años la acetona, una sustancia volátil que puede liberarse antes de una crisis. Su epilepsia es refractaria, lo que significa que resulta muy difícil de tratar con medicamentos. "Ha probado casi el 90% de los fármacos antiepilépticos disponibles en el mercado", señala su padre.
Berta puede anticipar las crisis epilépticas con una anticipación de 4 minutos, pero también es una perra muy amigable y afectuosa. "La conexión que han establecido es realmente intensa. Desde el principio, se buscaban mutuamente, como si ella entendiera que Ariel necesitaba ese afecto", comenta su padre. Una vez que el perro nota las señales, generalmente avisa con una acción específica, como ladrar, tocar con su pata o mostrar un comportamiento inusual. Cuando Ariel comienza a tener convulsiones, ella se sube a su lado y le empieza a lamer las manos hasta que la crisis se detiene. "Esto le ayuda a reenfocarse en el momento presente y a mantener la calma".
A raíz de su enfermedad, Ariel tiene una parte de su cuerpo sin movimiento, lo que impacta su mano izquierda. No obstante, su padre menciona que él se esfuerza por acariciar a Berta. "Son como suaves toques. Él intenta devolver ese afecto y le asiste en su limitación".
Perros Y Su Impacto En El Autismo Infantil
"Se comprenden y se quieren como si fueran amigos de toda la vida". Antes de llevar a Yogui a su hogar, Vicky, la mamá de Benjamín, que tiene 5 años y padece un trastorno del espectro autista (TEA), dedicó bastante tiempo a buscar formas de apoyar a su hijo. "Nos ha ayudado a disminuir las autolesiones y a eliminar esos impulsos de salir corriendo y cruzar la calle sin mirar", cuenta a RTVE.es.
Desde que Yogui se instaló en su hogar, Benjamín se muestra sereno en los lugares donde se encuentra con él, concentrándose en el presente. "El autismo se manifiesta de manera distinta en cada niño. Hemos logrado manejar muchas situaciones, como hacer que cuente hasta tres antes de cruzar. Antes, él tenía una obsesión por subir y bajar las escaleras del centro comercial, pero ahora ya no lo hace", comenta a RTVE.es Meritxell Arias, directora de AAS DISCAN, donde Yogui recibió su entrenamiento.
Benjamín y su perro de apoyo en la costa.
Vicky señala que salir de casa puede ser un reto para las familias, pero gracias a Yogui, los paseos se han transformado en momentos placenteros. Benjamín se relaciona con las personas que preguntan por su perro, aunque frecuentemente tienen dificultades para entrar a ciertos lugares debido al desconocimiento de las regulaciones. En Canarias, la normativa sobre perros de asistencia fue establecida en noviembre de 2023, y Yogui es el primer perro que está en proceso de acreditación en su área. "Las personas no suelen conocer su existencia y a menudo tenemos que explicarles la ley y lo que significa el TEA", comenta Vicky.
En respuesta a esta situación, solicita que se aceleren los plazos de certificación en cada comunidad autónoma, ya que "por lo general son prolongados y engorrosos", lo que impide que los niños puedan disfrutar de su derecho a acceder a los lugares.
Nuevos Tipos De Perros De Asistencia Reconocidos
Los perros de apoyo psiquiátrico están ganando terreno en España. Estas mascotas son elegidas y capacitadas para asistir a personas que padecen algún tipo de trastorno mental, como la depresión, la ansiedad, o problemas relacionados con traumas y situaciones estresantes. LealCan, una organización dedicada a la formación de perros de asistencia, es pionera en el país en la implementación de estos animales. "La salud mental se está normalizando cada vez más. La gente busca opciones que les ayuden a enfrentar sus dificultades", comenta Enrique Solís, director de LealCan, en una entrevista con RTVE.es. También subraya que estos perros son distintos de los perros de apoyo emocional, que son muy comunes en Estados Unidos y que carecen de un entrenamiento especializado respaldado por una institución reconocida.
Después de tres años de terapia y tratamiento psiquiátrico, Sara aún no había logrado recuperarse por completo de un trastorno adaptativo que implicaba ansiedad y estrés postraumático. "Muchos no entienden el grave riesgo que supone tener una enfermedad mental crónica y la lucha diaria que representa", afirma en una entrevista con RTVE.es. Pasó de pasar largas jornadas en cama sufriendo ataques de ansiedad y estrés que duraban entre 6 y 8 horas, a poder salir de casa sin temor, viajar sin necesidad de medicación y retomar su vida laboral.
Snow asiste a Sara en las áreas con gran afluencia de personas. LEALCAN.
De acuerdo con Solís, además de ser preparado para ingresar a espacios públicos, Snow también adquirió habilidades para mitigar el malestar de Sara en determinadas circunstancias y promover su independencia. "No soporto las multitudes y, en ocasiones, me he desmayado por el estrés", relata Sara. Snow se aleja de esos entornos cuando es factible, y cuando no puede evitarlo, establece contacto visual con ella para facilitar que se enfoque en él en lugar de en el entorno que le agobia. Asimismo, Snow le ofrece consuelo emocional y respaldo mediante la aplicación de presión física y un contacto cercano.
"Muchas personas no se dan cuenta del riesgo que implica padecer una enfermedad mental persistente."
Sara explica que un perro de asistencia psiquiátrica no es la única respuesta, sino que forma parte del enfoque terapéutico, aunque subraya que Snow ha sido clave en su proceso. "Todavía hay días difíciles y momentos de crisis, pero ya no son igual que hace cuatro años". Con la llegada de Snow a su vida, ha recuperado su apetito, las ganas de salir y la ilusión por retomar sus pasatiempos. "Fue la mejor elección que he hecho y gracias a él tengo la fuerza para seguir".
"El Código Postal No Debería Limitar Nuestros Derechos"
En España, no existe una legislación nacional uniforme que rija los perros de asistencia; cada comunidad autónoma establece sus propias normas y solo un número limitado ha creado un marco legal específico. Esta situación da lugar a la ausencia de procedimientos definidos para la solicitud, reconocimiento y registro de estos perros y de sus entrenadores.
"El código postal no debería determinar nuestros derechos", sostiene Cristina Rodríguez, de la organización Luca, especializada en perros de asistencia, en una entrevista con RTVE.es. Desde 2017, este grupo de voluntarios que cuenta con diferentes discapacidades actúa como intermediario entre las familias y las asociaciones reconocidas. "Ofrecemos toda la información disponible sobre legislación, derechos, asociaciones y otros aspectos para prevenir, en parte, fraudes", detalla Rodríguez. También han creado una guía sobre la situación de los perros de asistencia en el país.
Perros en los tribunales de la infancia.
Otra de las peticiones consiste en incrementar las ayudas y subvenciones estatales para que sean más accesibles a las personas en situación de vulnerabilidad. Los perros de asistencia suelen tener un costo que varía entre 6.000 y 20.000 euros, y en la actualidad, la mayoría de las familias tienen que hacerse cargo de estos gastos, ya que los animales deben cumplir con ciertos requisitos para poder ser certificados.
Durante la búsqueda de una mayor unidad y entendimiento, es fundamental reconocer el efecto benéfico que estos perros tienen en la vida de individuos como Cristina, Manuel y Sara. Estos seres no solo proporcionan ayuda en tareas prácticas, sino que también brindan un significativo apoyo emocional, al igual que cualquier otro perro. La batalla por derechos justos y accesibles avanza, con la esperanza de que en un futuro todos los que dependen de perros de asistencia puedan gozar de una igualdad y reconocimiento más amplios.