¿Cuál es la mejor hora para comer fresas o frutillas?
Las frutas conocidas como fresas o frutillas son bayas cuyas semillas se desarrollan en el exterior y no dentro de la pulpa. Aunque se considera una fruta de temporada de verano, en algunos países se cultivan en invernaderos y están disponibles durante todo el año.
Las frutas rojas que aparecen durante la temporada de verano son mucho más sabrosas y beneficiosas para nuestro organismo, la naturaleza nos brinda sus frutos de calidad. Estas pueden ser de tipo silvestre o cultivadas, pero siempre es recomendable adquirir las que son ecológicas para evitar la presencia de pesticidas en ellas, ya que se deben comer sin pelar. En cualquier caso, es imprescindible lavarlas con minuciosidad antes de su consumo.
Este fruto es perfecto para integrar en un programa para bajar de peso: otorga únicamente 40 calorías por cada 100 gramos y es una fuente de fibra alimenticia, la cual produce sensación de llenura.
En esta situación, es recomendable prescindir de la clásica compañía de la crema batida y consumirlas solas o acompañadas de jugo de naranja.
Beneficios De Las Fresas Para La Salud
El tono de la fresa se genera gracias a las antocianinas y su contenido de hierro. Además, la fresa tiene una gran variedad de minerales como magnesio, potasio, calcio, fósforo, manganeso, cobre y silicio, lo que la convierte en una fuente valiosa de nutrientes. También es rica en vitaminas C, K y B9 (conocida como ácido fólico).
El sitio web Cuerpo Mente indica que consumir 200 gramos de fresas al día satisface el 17% de lo que se necesita de hierro diariamente, el 19% de magnesio y el 200% del requerimiento de vitamina C. Las fresas son una excelente opción para reponer los minerales que se pierden tras ejercitarse y para seguir una alimentación saludable.
El hierro es esencial para prevenir y tratar la anemia, mientras que la vitamina C es un antioxidante que preserva la salud de la piel y de los órganos y tejidos. La vitamina C y el ácido fólico mejoran la absorción del hierro que se encuentra en las fresas y en otros alimentos. Cuando se combina con ácido fólico, el hierro actúa como un laxante suave y natural. Además, la mezcla de estos nutrientes ayuda a mantener una piel resplandeciente.
Según un informe novedoso que se ha difundido en la revista Journal of Nutritional Science, se ha demostrado que el consumo de frutillas incrementa en gran medida los valores de ácido fólico y vitamina C presentes en el torrente sanguíneo.
El potasio es un efectivo diurético que favorece la reducción de la presión arterial y facilita la eliminación de toxinas tales como el ácido úrico a través de la orina. Asimismo, proporciona beneficios en la lucha contra enfermedades hepáticas, cálculos y la enfermedad de la gota.
Los pigmentos conocidos como antocianinas resultan muy beneficiosos para los vasos sanguíneos al disminuir el nivel del LDL o colesterol nocivo y también los triglicéridos. Además, tienen la capacidad de favorecer la quema de grasas acumuladas, según señala Come con Salud, entre otras ventajas.
Gracias a la presencia del ácido salicílico, esta fruta se convierte en una excelente aliada para combatir la artritis y el reumatismo gracias a sus propiedades antiinflamatorias. Además, su contenido de vitamina K, magnesio y manganeso, hace que estos nutrientes actúen en sinergia para mantener los huesos fuertes y sanos.
. Recomendaciones Para Comer Fresas
La forma más óptima de ingerir fresas y beneficiarse de sus propiedades es ingiriéndolas frescas y sin procesar. A pesar de que en temporadas de excedente se pueden utilizar para la elaboración de mermeladas, al no someterlas a altas temperaturas aumenta su aporte nutricional.
Durante la primera comida del día, proporcionan una energía única al cuerpo, otorgándole la fuerza necesaria para llevar a cabo todas las tareas diarias.
Además, la banana también es ideal para la hora del té, ya que su alto contenido de fibra dietética permite una mayor sensación de saciedad y favorece la ingesta de porciones más moderadas de alimentos más densos en calorías. De igual manera, esa fibra resulta muy beneficiosa para la salud del colon.
Las fresas no solo se usan como postre, sino que también son ideales para agregar a ensaladas o servir como acompañamiento en platos principales. Combinan muy bien con la rúcula y la espinaca fresca, y en ambos casos aumentan la cantidad de hierro y vitamina C.
