El Milan es un polvorín
Actualizado al 16 de diciembre de 2024 a las 12:13 CET.
El empate sin anotaciones frente al Genoa este domingo generó una gran indignación entre los seguidores del Milan, molestos por el desempeño tan decepcionante de su equipo en una jornada tan significativa como el 125 aniversario del club. Además, están agotados de observar el desorden que impera en el vestuario dirigido por el portugués Paulo Fonseca.
La atmósfera festiva que se respiraba en el Estadio Giuseppe Meazza (San Siro) antes del encuentro se convirtió en una nueva decepción colectiva tras un desalentador empate sin goles. Las leyendas presentes en la conmemoración del 125 aniversario del club, como Rijkaard, 'Pippo' Inzaghi, Baresi, Van Basten y Gullit, fueron los únicos en ser aclamados por una afición cada vez más cansada.
Justo antes del accidente, el clima se volvió adverso para la directiva del Milan. La enorme pancarta que decía "honramos a nuestras leyendas, símbolos de un Milan que ya no existe" apuntaba hacia el palco, donde el estadounidense Gerry Crdinale, propietario del fondo de inversión RedBird Capital que posee el club, ni siquiera estuvo presente en un día tan significativo.
Los futbolistas en el terreno de juego pudieron responder al ambiente festivo que rodeó este encuentro tan significativo con una victoria reconfortante. Vestidos con una camiseta que rinde homenaje a la de los años 80, sin nombre, en un estilo clásico, no lograron crear amenazas para un Genoa que lucha por evitar el descenso desde la llegada del francés Patrick Vieira como entrenador.
Solo el español Álvaro Morata, con un tiro al travesaño en la segunda parte, estuvo cerca de lograr el gol del 'rossonero', el cual nunca se concretó.
Razón por la cual, las críticas momentáneamente dejaron de apuntar hacia la directiva, incluido el sueco Zlatan Ibrahimovic, y se enfocaron en un equipo que actualmente se encuentra perdido en la Serie A, ocupando el octavo lugar en la tabla y a 14 puntos de la cabeza, además de a 5 de los puestos europeos. A estas alturas de la temporada, el objetivo es alcanzar el top-4 para clasificar a la 'Champions'.
Después del partido, una vez fuera de San Siro, los seguidores se congregaron y renovaron sus críticas hacia la administración del club con un enorme cartel que decía: "Directivos incompetentes, club sin aspiraciones. No están a la altura de nuestra historia", se quejaron los 'tifosi'.
Actualmente estamos viviendo una etapa muy complicada, en la cual los conflictos dentro del equipo son reiterados. Fonseca ya avivó la tensión después del partido de la Liga de Campeones contra el Estrella Roja, con unas declaraciones muy polémicas.
"Me esfuerzo diariamente por ofrecer lo mejor de mí, pero veo que otros en el equipo no lo hacen. Si es preciso subir a los jóvenes de las divisiones menores, lo haré," advirtió.
Uno de los mencionados fue, sin duda, Theo Hernández, quien ya había estado involucrado en otra controversia con el entrenador al inicio de la temporada debido a su falta de dedicación.
El jugador galo no participó ni un solo minuto en un encuentro tan significativo, mientras que el entrenador optó por el español Alejandro Jiménez, quien se formó en las canteras del Real Madrid, pero ya pertenece al Milan.
El canterano Mattia Liberali también fue titular, mientras que su compatriota Francesco Camarda se quedó en el banquillo. Junto a Jiménez, ambos forman parte del grupo de jóvenes más valorados del club.
El Milan, que hace solo dos años, en 2022, se coronó campeón de la Serie A y que en 2023 llegó a las semifinales de la Champions, está pasando por uno de los momentos más difíciles de su historia reciente. Los aficionados están cansados, el equipo está dividido y, por el momento, la directiva no muestra signos de actuación.